La continuidad de tu negocio. ¿Estás dispuesto a parar?
Garantizar la continuidad del negocio y que la compañía pueda operar ante imprevistos se vuelve crítico en un mundo cambiante como el actual. Este entorno VUCA (volátil, de incertidumbre, complejo y ambiguo) obliga a estar preparados.
2020 fue la volatilidad. La fuerza de los cambios obligados produjo una catarsis en todos los niveles. La necesidad fue el catalizador para el progreso. En mayor o menor medida, todas las empresas son ahora diferentes.
La complejidad sigue una curva ascendente, llegando a rozar el límite de la capacidad humana. En este escenario aparece la tecnología como apoyo crítico en la búsqueda de la máxima productividad y desempeño de las personas. La creatividad y capacidad en la toma de decisiones diferenciará a las organizaciones referente de las perseguidoras. Adoptar la digitalización es una tarea que debe estar entre las prioritarias de las empresas lucenses.
La ambigüedad es el reflejo de un mercado repleto de comunicación en el que la distorsión de mensajes es una constante. La multicanalidad es un riesgo si afecta a la optimización de los recursos de las organizaciones, convirtiéndolas en más inestables, ineficaces y lentas.
No pudimos predecir los acontecimientos, no pudimos anticiparnos.
¿Pueden anticiparse tus sistemas?
El fracaso a la hora de levantar las organizaciones ante una contingencia como la vivida no es en sí la catástrofe, no aprender para poner en marcha una solución sí lo es.
¿Qué es un plan de contingencia?
Un plan de contingencia contiene medidas técnicas, humanas y organizativas que garantizan la continuidad de negocio en el ámbito de la tecnología e informática. Se trata de un plan de respaldo para poner en marcha los equipos dañados en un posible incidente o desastre.
Inicialmente se realiza una evaluación de riesgos, identificando amenazas y aclarando las prioridades organizativas. Fruto de ese análisis se presentan una serie de contra medidas para hacerles frente, estableciendo los recursos necesarios para ello y el protocolo de actuación, donde se detallan responsabilidades concretas y los roles a asumir por cada persona.
El plan de contingencia es un plan de emergencia y recuperación. La segunda y tercera barrera. Es imprescindible construir como muro principal un plan de medidas preventivas que minimicen la entrada en fase 2 y 3.
En resumen:
- Identifica los recursos disponibles
- Clasifícalos según prioridad
- Elabora un plan que contenga niveles de servicio adecuados a tu actividad
Déjalo en manos de expertos que realicen un análisis objetivo desde una perspectiva externa a la organización y dentro de un proyecto de gestión integral de los sistemas de tu compañía.
Consúltanos, estaremos encantados de escucharte, comprender las necesidades de tu negocio y, tras un análisis exhaustivo, acompañarte en este importante paso para tu negocio. Con una atención personalizada y un proceso en el que priorizamos la correcta gestión del cambio en los usuarios, ¡todo será más fácil! Enviar consulta LUGO.